PLAYA DE AGAETE
Playa de Agaete
Famosa playa del norte isleño junto con la zona dedicada al muelle de Agaete.
Aguas limpias y cristalinas que por su posición conservan una interesante fauna marina, muy propia para el buceo por el litoral noreste que mantiene riscos acantilados de gran belleza, allí el especial ???Dedo de Dios???, monolito que alzaba al cielo su grandiosa forma y hoy en día erosionado y destruido su tramo más elevado.
De gran riqueza marina, pues famoso es el pescado fresco y de barquilla de la zona norte con ejemplares de diversas especies interesantísimas (salemas, samas, sardinas, pulpos, lapas, seifías,???). Pescadería tradicional y artesano con nasas y redes de toda la vida. Imágenes marineras de las mujeres en la playita de guijarros, tiradas al suelo tejiendo sus redes al sol. Así como sus secaderos al aire y brisa marina de pejines, jareas y potas.En esta zona de Agaete se realizó un muelle y zona de cobijo para embarcaciones de paseo y tránsito, un muelle para la línea de yet-foil, ferrys y catamaranes que pudiera unir en línea recta y en menor tiempo las islas vecinas, Gran Canaria y Tenerife. Este muelle ha sido una gran ayuda para el muelle de La Luz, así como para carga y descarga del comercio entre islas.
La ermita de Las Nieves es otra de las joyas del lugar, un tríptico de pintura flamenca del siglo XVI, con imágenes del nacimiento del Niño Jesús, de un valor incalculable. Posiblemente llegó en esos barcos holandeses que pasaron y que iban rumbo a América, por esas épocas se podría haber cambiado a los oriundos canarios por frutos frescos, contra el mal del escorbuto que siempre se da al no consumir frutos frescos en tanto tiempo de travesía. Igual pasaría en otro caso, otro tríptico que llegó a Canarias, a Tenerife, al pueblo costero de Taganana, en donde también se conserva otro ejemplar de pintura flamenca.
La costa de Agaete es mágica en cuanto a festividades ancestrales: la fiesta de La Rama. En ella, las gentes iban en saltos y bailes hasta la cumbre y allí recogían ramas frescas del monte, ramas para alzar en bailes y saltos y volver a bajar desde la cumbre hasta la orilla, a la playa del puerto de las Nieves hoy en día. A llegarse al mar, meterse en las aguas y golpear con las ramas la superficie del mar, pidiendo al cielo y a los dioses que lloviera.
Agaete y su costa forma parte de pueblo de mar y monte. La zona interna, la Umbría y el Valle merecen especial mención por sus cafetales, cañas azucareras, aguacates, piñas, papayas y mangos. Es muy interesante la fuente de agua de Agaete, aguas termales y en donde dio pie a la creación de un hotel para sus baños de salud. Las aguas se industrializaron y embotelladas en depósitos de tres cuartas, eran muy famosas por su sabor a hierro, y las botellas completamente canelas por sus minerales, aguas ???ferrugientas??? muy importantes para la salud.
Agaete sigue manteniendo un valle lleno de frutos y belleza tan emotivo que se creó ???el Huerto de las flores???, lugar de una muy interesante colección de plantas de muchísimos lugares del mundo, un pequeño jardín botánico para el disfrute de propios y ajenos. Utilizado para el descanso y el paseo y también como lugar de enclave de un acontecimiento anual de cultura y buen gusto: el recital de poetas de todas las islas. Siempre abierto a reunir a la crema de la cultura canaria, no olvidemos que Tomás Morales fue médico de Agaete y que Alonso de Quesada veraneaba para curar sus problemas bronquiales, que el mismo Saulo Torón se desplazaba para estar allí con sus amigos, hoy en día inmortalizados en el ¡Paseo de los Tres poetas???.
Siempre esta costa norteña hoy abierta a todos los visitantes, con restaurantes marineros de pescadito fresco y de barquillo; mercadillo al aire libre que recorre el paseo con infinidad de puestillos de productos canarios, africanos y latinos.
Una playa para el disfrute de bañistas y deportistas y un muelle adecuado a las necesidades isleñas de tránsito y comercio.
Agaete es la joya del norte. No se la pueden perder.